LOS MEDIOS MASIVOS DE COMUNICACIÓN, EL PERIÓDICO
“La aparición de un ecosistema comunicativo se está convirtiendo para nuestras sociedades en algo tan vital como el ecosistema verde, ambiental. Se hacen más claramente visibles entre los más jóvenes: en sus empatías cognitivas y expresivas, en los nuevos modos de percibir el espacio y el tiempo, la velocidad y la lentitud, lo lejano y lo cercano. Se trata de una experiencia cultural nueva”.
Para nadie es un secreto que los medios de comunicación ejercen un fuertísimo poder sobre la sociedad puesto que poseen la potestad sobre la información, “la historia de los medios de comunicación y especialmente de la prensa escrita podría remontarse hasta el siglo XIV, con la creación de la imprenta por parte Johannes Gutenberg”.
A continuación lo explica el experto Jesús Martín Barbero: “Los medios están también suministrándole al ciudadano unos mínimos de saber, sin los cuales no se puede desenvolver en la ciudad. Por más que cuestionemos, con razón, el valor de la información que transmiten los medios, por más que cuestionemos los saberes que pasan por los medios, para la inmensa mayoría de los ciudadanos, los medios están suministrando saberes sin los cuales los ciudadanos hoy no se podrían mover en las ciudades”.
Los medios de comunicación cumplen un papel muy importante, como difusores de información y están por determinar hasta qué punto son instrumentos de información sobre la actualidad, al servicio de los lectores y de sus intereses ofreciéndoles diferentes temas informativos. “En un primer momento, estudiar los procesos de comunicación, desde el ámbito de lo popular, significó ante todo la necesidad de desplazar la mirada desde arriba hacia abajo, desde aquella visión que retenía sólo que los medios masivos o los procesos masivos le hacían a la cultura culta, a meter el espacio de estudio lo que los medios y procesos masivos tienen que ver con los mundos de las culturas populares, es decir, con las culturas de las mayorías en América Latina. Lo que se llama cultura popular ha estado mediado por procesos de comunicación que han venido a unificar, a centralizar, a masificar”.
Durante años los medios han sido asociados únicamente a la industria del entretenimiento, teniendo muy poco en cuenta la parte informativa y educativa de estos, sus contenidos van de la mano con intereses políticos y económicos, modificando el valor de la información y su imparcialidad. “Actualmente, observamos en grandes cantidades en las publicaciones que los periódicos realizan con muy poca calidad en el contenido sin importar el mensaje que está llegando a los lectores. Los periódicos ofrecen una variedad de contenidos informativos y publicitarios para todo tipo de personas, desde hace décadas, aunque sólo ahora nos damos cuenta, los nexos entre medios y cultura popular forman parte de estructuras más amplias de interacción social”.
Hoy en día, los medios de comunicación están al alcance a todo tipo de público, muestran contenidos de carácter educativo pero sus consumidores prefieren los de entretenimiento. Los medios masivos de alguna forma han popularizado modos tomados de diferentes culturas, creando así una cultura única, según las particularidades de cada medio. Pero se debe hacer la diferencia entre la popularidad de las culturas y lo tradicional, como representación mundial que se tiene de estas y lo cual identifica cada uno de sus aspectos.
“Para iniciar con un entendimiento completo de los medios de comunicación y su impacto social se requiere analizar a fondo los procesos de producción y distribución de los mensajes, pues el contenido y el impacto en la audiencia dependen de lo que haya ocurrido en las diferentes etapas y procedimientos de su manufactura. Dentro del enfoque positivista de las teorías de la comunicación y particularmente con respecto al estudio sobre los emisores, se encuentra el enfoque llamado sociología de la producción de mensajes. De acuerdo con Lozano (1996: 57-58.), el estudio de los procesos de elaboración y selección de noticias evoluciona a un enfoque más completo y amplio, al que le podemos denominar sociología de la producción de mensajes”.